7 Tips para elegir tu vestido de novia

¿Quién no se ha imaginado alguna vez el vestido de novia con el que le gustaría casarse?

Y hay que reconocer que gran parte de culpa la tienen las películas románticas americanas donde todo está súper idealizado con unos vestidos radiantes.

Todo tan idílico… que claro, nosotras también queremos lucirnos y tener nuestro momento de gloria y esplendor con un vestido de novia espectacular.

Aunque ¡cuidado!, que cuando llega la hora de buscar ese vestido ideal y lo encuentras… puede que no sea lo que esperabas.

Pero tranquila, porque para eso los hay de diferentes formas, estilos, tejidos y detalles en los que indagar y buscar hasta dar con el mejor para ti.

En este artículo te explicamos lo que necesitas saber para encontrar tu vestido ideal, y para ello vamos a darte 7 tips para elegir el vestido de novia que más se adapte a ti.

1. Ten un presupuesto límite

En nuestro país lo “normal” es comprar el vestido de novia, pero por ejemplo en EEUU lo que hacen es alquilarlo. Así se ahorran bastante dinero porque es un vestido que solo se usa una vez, por lo que no se le puede sacar rentabilidad.

A lo mejor el precio no es un problema para ti, ya que solo te casas una vez en la vida (o esa es la idea…) y lo que te cueste no es un impedimento para tener tu vestido de ensueño.

Pero hay novias que deben ponerse un coste límite porque una boda conlleva muchos gastos y no pueden colarse demasiado en el presupuesto.

Así que nuestro consejo es que si tienes un límite y un presupuesto fijado, que sea lo primero que digas en la tienda de novias para que no veas otros más caros, no vaya a ser que te enamores de alguno y no te lo puedas permitir…

2. Prueba diferentes estilos

Hay novias que no llevan ninguna idea del tipo de vestido que quieren, pero por lo general todas tenemos cierta predilección por algún estilo.

Si tú tienes una imagen en la cabeza de la forma del vestido, nuestro consejo es que no te pruebes solo vestidos con ese corte, porque a lo mejor hay un estilo que nunca te ha llamado la atención pero al vértelo puesto te sorprendes de lo genial que te queda.

Como se suele decir cuando uno va de compras: “es cuestión de verlo puesto”. 

Además, imagínate que lo que buscas no te queda bien… ¡No te queda más remedio que probar más opciones!

3. Elige según tu personalidad

Cada persona tenemos un carácter y un estilo diferente, y a la hora de elegir el vestido de novia tenemos que guiarnos por nuestro instinto.

Puede que tus gustos se salgan un poco de lo que es “normal” o convencional, o simplemente no estaría muy bien visto ante los demás, pero lo importante es lo que quieres tú para tu día especial.

Cuando vayas a probarte vestidos de novia, elige bien a quién vas a llevar de acompañante para aconsejarte o darte su opinión, porque puede volverte loca poniéndote pegas…

O si eres de ideas fijas da igual quién vaya, porque seguramente sigas tu intuición en todo momento (y no le hagas ni caso…).

Así que según tu personalidad quédate con el estilo de vestido de novia que más se adapte a ti, elige el escote, el color, la tela, la caída, la cola, etc, todo enfocado a tus gustos y encontrarás tu vestido perfecto.

4. Ten en cuenta la forma de tu cuerpo

Puede que tengas una idea de vestido de novia que quieres pero que al probártelo no te quede bien, y esto es más común de lo que crees.

En estos casos nos ayudan mucho las dependientas de las tiendas de novias, porque solamente con vernos y echar un vistazo a la forma de nuestro cuerpo ya pueden clasificar los tipos de vestidos que nos pueden ir mejor.

Depende de si eres bajita, muy alta, si tienes la cadera muy marcada, si tienes algunos kilos de más, si estás muy delgada y sin curvas…, vas a tener que decantarte por un estilo de vestido que te siente bien.

También tienes la opción de que te modifiquen o diseñen el vestido y adaptarlo a ti para que te favorezca y te veas perfecto con él.

Total, que si buscas un tipo de vestido de novia en concreto ten en cuenta que según la forma de tu cuerpo puede que te encaje o puede que no. ¡No queremos que te lleves un chasco!

5. Escoge tus tejidos favoritos

Quizás no has pensado en qué tipo de tela quieres que lleve tu vestido de novia, pero va a influir mucho dependiendo del estilo que elijas, ya que según el tejido el vestido será de una forma u otra.

Si por ejemplo te gustan los encajes, estás de suerte porque puedes encontrarlos tanto en vestidos ceñidos como en vaporosos. Por el contrario, si lo tuyo son los vestidos con volumen debes elegir un tejido de gasa o de tul.

Si prefieres los vestidos no muy ajustados pero que entallen tu cuerpo y que tengan caída, tendrías que elegir los que sean de seda o de raso.

Y es que hay un montón de tipos de tejidos diferentes y cada uno cumple una función: aportan elegancia, sencillez, decoración, transparencia, luminosidad…

Piensa qué toque quieres darle a tu vestido y escoge la tela adecuada para ello.

6. Encuentra la comodidad

El día de tu boda será un día largo y estarás muchas horas de aquí para allá sin parar. Por eso te aconsejamos que elijas un vestido que sea cómodo, con tejidos agradables al roce de la piel y que no tenga nada que te haga sentir molesta.

Cuando te pruebes un vestido que te guste y que tenga bastantes papeletas para ser tu vestido definitivo, camina con él, siéntate y levántate, alza los brazos, agáchate, da unas vueltas, baila, salta…

Comprueba que no es engorroso y haz (casi) todo lo que harías el día de tu boda para que realmente compruebes que es cómodo y que estarás agusto con él.

Y no solo debes sentirte bien con el vestido, sino con los zapatos, la ropa interior, el complemento que te pongas en el pelo… En definitiva con cualquier detalle que quieras lucir en tu día especial.

7. Sé original con los detalles y complementos

Una vez que ya tengas tu vestido de novia elegido debes ir en busca de los complementos: zapatos, pendientes, pulseras, tocado, diadema, sombrero… Ya simplemente queda ultimar todos los detalles para que en conjunto estés perfecta.

Hoy en día es muy común que un modisto nos haga el tocado o adorne los zapatos con tela del vestido, para que así todo vaya a juego.

También hay complementos o joyas que puedes agregar al vestido: colocar un broche como cinturón, unos adornos de pedrería en los hombros, en las mangas…

También puedes jugar con los colores añadiendo un velo de tonos suaves como el rosa palo o empolvado, amarillo champán, colocarle a la falda un tul de color, incluso combinar con los colores del ramo de novia para dar un toque alegre y atrevido a tu look.

En definitiva, puedes convertirte en diseñadora por una vez y crear tu vestido como más te guste y con todos los detalles que se te ocurran.

Esperamos que te hayamos ayudado con estos 7 tips para elegir tu vestido de novia ideal. Elige con el corazón y conseguirás el vestido que te haga brillar como nunca y, lo más importante, ¡que te haga feliz!